Ruy Mauro Marini
( 1932 - 1997 )
Economía
Siglo XIX y principio del XX

En contexto

Mauro Marini, sociólogo y revolucionario brasileño, se formó y publicó sus obras a través de la mirada de distintos eventos históricos en Latinoamérica como lo fueron la revolución cubana; la emergencia y maduración de la izquierda revolucionaria; el golpe militar en Brasil; la masacre de Tlatelolco; el auge de masas y la experiencia del gobierno de Salvador Allende; el fortalecimiento del Movimiento de Izquierda Revolucionaria y su quehacer en el periodo pre-revolucionario en Chile; el golpe militar encabezado por Pinochet y el agudo proceso contrarrevolucionario que se desata en la región, siendo privilegiado partícipe en muchos de estos procesos (Olave, 2015).

Marini, nació en 1932 en Barbacena, Brasil. Estudió administración pública en la Escuela Brasileña de Administración Pública, de la cual se graduó en 1957. Obtuvo una beca del gobierno francés para la Fundación Nacional de Ciencias Políticas y entre 1958 y 1960 realizó allí sus primeros estudios sobre la obra Karl Marx. En 1961, de regreso en Brasil, fue uno de los fundadores de la Política Obrera, la cual era una organización que rechazaba, para América Latina, las tesis de los partidos comunistas sobre la realización de una revolución democrático-burguesa, y proponía en cambio un programa socialista para las luchas populares. Asimismo, participó de la fundación de la Universidad de Brasilia siendo profesor junto con un cuerpo docente que contaba con la presencia de Andre Gunder Frank, Victor Nunes Leal, Theotônio dos Santos y Vania Bambirra. Inició sus estudios de doctorado sobre bonapartismo, que fueron interrumpidos por el golpe militar de 1964 (Martins, 2017).

Martins (2017), refiere cómo Marini fue detenido en julio de 1964 a raíz del golpe militar que depuso al presidente constitucional de aquél entonces, João Belchior Marques Goulart. Debido a su pensamiento de izquierda, fue secuestrado por la Marina y entregado al Ejército. Después se exilió en la Embajada de México donde se vinculó con el Centro de Estudios Internacionales del Colegio de México. Residió ahí hasta 1969 ya que, posterior al movimiento de los estudiantes en el ´68, la aparición de un artículo en la prensa sobre el movimiento estudiantil brasileño llevó al gobierno de mexicano a presionarlo para abandonar el país. Marini se estableció entonces en Chile, se acercó al Movimiento de Izquierda Revolucionaria (MIR), del cual se convirtió en dirigente y, posteriormente, por una invitación del Centro de Estudios Socioeconómicos (CESO), se mudó a Santiago.

Un nuevo golpe militar en 1973, ahora en Chile a manos de Pinochet, lo llevó a un nuevo exilio y así, tras pasar por Panamá y Alemania, Marini terminó por establecerse en la Facultad de Ciencias Políticas y Sociales de la Universidad Nacional Autónoma de México donde fue profesor en la licenciatura en sociología. También fue titular de la asignatura ‘Historia Mundial Económica y Social’. En la Facultad de Economía de la UNAM, fue cofundador, profesor e investigador de la División de Estudios de Posgrado y llegó a ser Profesor Titular de Tiempo Completo (Sotelo, 2017).

Finalmente, gracias a la amnistía política, en 1979, Marini se dividió un tiempo en su estancia entre México y Brasil, pero en 1984 volvió definitivamente a su país dedicándose a proyectos como la organización de cursos de posgrado en la Fundación Escuela y Servicio Público de Río de Janeiro. La extensión de la amnistía política al campo profesional lo reincorporó a la Universidad de Brasilia en 1987, donde volvió a formar parte del Departamento de Ciencia Política y Relaciones Internacionales. En mayo de 1990 volvió a Río de Janeiro retomando las líneas de investigación sobre pensamiento latinoamericano, reconversión industrial y socialismo. A fines de 1993 aceptó la invitación para dirigir el Centro de Estudios Latinoamericanos (CELA) de la UNAM. Reorganizó el posgrado y articuló la actividad de investigación en torno al pensamiento social latinoamericano en el siglo XX (Martins, 2017).

Marini falleció en 1997 en Río de Janeiro a los 65 años, debido a un cáncer fatal.

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Contexto intelectual

Es posible observar en la obra de Marini la importante influencia de Karl Marx. Asimismo, una influencia marcada por la lectura que el Partido Comunista Italiano realizó de la obra de Gramsci. Él mismo refiere una gran influencia de Alberto Guerreiro Ramos quien fue su profesor de sociología, así como de Julien Chacel, profesor de economía.

Por otra parte, establece una importante amistad con Eric Sachs, quien representó para él una gran figura de influencia, así como François Gazier, quien se convertiría en el primer director del futuro Instituto para el Estudio del Desarrollo Económico y Social y menciona “le debo mi iniciación en las reglas del método de análisis y exposición, el producto más genuino del genio francés” (Marini, 1991, apartado 1, El comienzo).

Pensamiento y reflexiones en torno a la democracia

En La lucha por la democracia en América Latina (1985), Marini destacó la importancia de la democracia en las luchas sociales y políticas de América Latina ya que, en dicho momento había una generalidad en Latinoamérica de periodos de autoritarismo y represión del que apenas se comenzaba a salir. Para Marini (1985) “la idea de democracia involucra contenidos, se anexa conceptos y apunta a significados que trascienden su definición corriente” (p.3).

Entre estos conceptos, el autor analizó la soberanía, haciendo referencia a que, “en América Latina, hablar de democracia implica, plantear el tema de su capacidad para autodeterminarse, es decir, de fijarse sus metas en libertad, atendiendo primariamente a las exigencias de sus pueblos” (Marini,1985, p.3).

Asimismo, consideró de importancia analizar la justicia social pues “la lucha por la democracia es la lucha contra la dominación y explotación de los muchos por unos cuantos, es la lucha por un orden social tendiente a la justicia y a la igualdad, es en suma —allí donde se vuelve más definida— la lucha por el socialismo, importando poco los calificativos que a él se adhieran o los plazos que se establezcan para su consecución” (Marini,1985, p.3).

Para la consecución de la democracia Marini expresó la importancia del movimiento popular en la unificación social y la reorganización de la izquierda:

En la lucha por su propuesta democrática, el movimiento popular necesita más que nunca de su unificación en el plano social y de la reconstitución de sus direcciones políticas. La reorganización de la izquierda es hoy un imperativo para que la idea de democracia, tal como se ha abierto paso en la conciencia popular latinoamericana, se convierta en realidad. (Marini, 1985, p.9)

Por otra parte, en Economía y democracia en América Latina (1994), Marini señaló la importancia de comprender la democracia como un modo de organización política, la cual aporte a la ciudadanía el derecho fundamental de disponer de la economía. Esto sólo sería posible cuando las fuerzas sociales empujen la construcción de un nuevo marco jurídico-institucional, que ponga a su disposición las bases de la economía. Asimismo, Marini (1994), expone que “un cambio de esta naturaleza no será posible si las masas no se dedican a provocarlo, mediante la lucha política cotidiana” (apartado 7).

Una de sus principales aportaciones refiere a la “dialéctica de la dependencia”, mediante la cual sentó la base de una economía política de la dependencia. Los principales aspectos de esta economía son, de acuerdo con Martins (2013), “la comprensión del capitalismo como un sistema mundial jerarquizado, monopólico y desigual, que produce y reproduce patrones nacionales/locales distintos de acumulación” (p.33).

Asimismo, Marini trabajó la teorización del modelo político latinoamericano, pensando el concepto de Estado de contrainsurgencia el cual se pone en funcionamiento a través de la construcción de democracias tuteladas, con aparatos militares y económicos más allá del control del poder legislativo.

Finalmente, respecto a la democracia, Marini consideró que “las democracias liberales en América Latina se asientan sobre la gran fragilidad institucional. […] la democracia representativa […] supone la pasividad de las grandes mayorías de la población y abren margen para importantes retrocesos en conquistas acumuladas en la economía política del trabajo” (Martins, 2013, p. 41). Para que en América Latina se realizara un verdadero cambio político, Marini consideró la necesidad de “un proyecto político comprometido con cambios estructurales sustantivos, como la erradicación de la pobreza y la reducción de las desigualdades, implica la organización de la clase trabajadora y de los movimientos sociales como sujetos políticos” (Martins, 2013, p. 41).

Impacto de su pensamiento en el mundo fáctico

La obra de Ruy Marini logró dar forma a la teoría marxista de la dependencia, explicando las razones de la emergencia y reproducción del capitalismo dependiente, en su inserción en el sistema capitalista mundial. No sólo fue productivo teóricamente, sino que fue militante activo en diversas organizaciones revolucionarias. Logró explicar la actualidad de la revolución socialista en América Latina, sus perspectivas, y los quehaceres que la hicieran posible. Trabajó el periodismo revolucionario, pasando por el debate y la crítica implacables en contra del reformismo, la reacción y la contrarrevolución (Olave, 2015).

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