Nació el 2 de julio de 1925 en Onalua en la provincia de Kasai bajo el nombre de Isaie Tasumbu Tawosa. Hijo de François Tolenga, un granjero católico nacido en 1897 y Juliana Amatu, quienes se divorciaron en 1940 debido a la personalidad explosiva de su padre.
La presencia europea que hasta ese entonces se había mantenido limitada incrementó después del asesinato de Ngongo Leteta, un importante comerciante que había mantenido la región invadida. Los nuevos ocupantes no representaban un gran cambio, pues en vez de tomar esclavos de la población los obligaron a proveerlos de caucho y marfil, situación que influyó en el pensamiento de Lumumba.
Desde muy pequeño Lumumba fue trazando su camino, siendo él el que elegía sus escuelas, tomando sus propias decisiones y luchando sus propias batallas. Sus amigos y familiares lo describieron como una persona curiosa, audaz y confiada.
Durante la década de los años 40 abandonó Onalua para trasladarse a Stanleyville con la intención de buscar la fortuna que no podría hallar en su pueblo natal, tal como el describiría en 1956:
“Para buscar trabajo con la esperanza de ganar el dinero suficiente para casarse y disfrutar de una comodidad media (comprar una bicicleta, un gramófono, ropa, calzado, etc.) y tener un poco más de libertad de la que es posible bajo el yugo de las leyes tradicionales y las obligaciones…“ (Lumumba, 1962)
El cambio de ciudad representó una gran transición en la vida de Lumumba, quien se adaptó a la vida de la ciudad y a su nuevo entorno cultural. Durante la década de los años 40, Congo se convirtió en productor del 73 por ciento del cobalto que se comerciaba a nivel mundial. Fue durante este periodo de bonanza, que Lumumba llegó a la ciudad (Zeiling, 2015).
Trabajó de 1944 a 1956 como civil en la oficina postal hasta que fue dimitido de su posición bajo los cargos de malversación de fondos, posteriormente comenzó su lucha por la independencia del Congo. Fue capturado el 1 de diciembre de 1960 y asesinado el 17 de enero de 1961 (Nzongola-Ntalaja, 2014).
Bandera
La educación de Patrice Lumumba durante los primeros años de su vida fue intermitente. Debido a las exigencias a las que era sometida la sociedad congoleña por parte de los colonizadores, la enseñanza de los niños comenzaba a la edad de 8 años, sin embargo, Lumumba contó con la suerte de tener un catequista católico a añadió a su enseñanza bíblica lo equivalente a los primeros años de primaria.
Continuó sus estudios en la escuela metodista en Wembo-Nyama en 1939, sin embargo, fue expulsado en 1942 debido a diferencias con su entonces profesor, un pastor congolés que lo consideraba un joven con comportamientos poco cristianos. En 1943 comenzó sus estudios en una escuela católica en Tshumbe Sainte-Marie, desafortunadamente, su estancia duró poco debido al ambiente hostil que había entre él y su profesor.
Posteriormente continuó sus estudios en la escuela metodista para asistentes de medicina en Tunda, de la que fue expulsado después de unos meses debido a la influencia del pastor que había ocasionado su expulsión el Wembo-Nyama.
Mientras trabajaba en la oficina postal comenzó a asistir a las clases vespertinas de la Escuela de los Hermanos Maristas, complementando esta actividad con la lectura por cuenta propia de libros en la biblioteca pública ansioso por mejorar su educación como una forma de mejorarse a sí mismo.
Debido a que las publicaciones marxistas estaban prohibidas en el Congo belga, Lumumba no estaba familiarizado con la mayor parte de las ideologías revolucionarias radicales del siglo XX. Gran parte de su pensamiento lo obtuvo a través de la observación del nacionalismo africano.
El pensamiento de Lumumba en torno a la democracia fue madurando con el paso de los años. Durante sus primeros años de vida, se le caracterizó por tener una fuerte apreciación de la colonización belga, declarando a favor de la creación de una sociedad belgocongoleña.
Sin embargo, posterior a 1958 su visión de la democracia cambia de manera radical, haciendo de la independencia de Bélgica, el único objetivo. Este objetivo incluía la búsqueda de un nuevo futuro para el país a través de la justicia social, la remuneración justa a los trabajos y la libertad del hombre negro.
Gran parte de esto es atribuido a los problemas estructurales que imperaban en ese entonces en Congo, dejando al país sin una opción económica, por lo que alcanzar la descolonización política suponía el primer paso para alcanzar la descolonización económica y social.
Otro de los puntos que preocupaba a Lumumba era la cuestión de género. Tal como él mismo expresó:
“Cuando tu civilizas a un hombre, solo civilizas a un individuo, pero cuando tú civilizas a una mujer, civilizas a una nación entera” (Lumumba, 1961)
Gran parte de su preocupación en el ámbito de género estaba enfocado en las mujeres casadas de su propia clase (debido a que los colonizadores belgas optaron por instituir el modelo europeo de familia nuclear, en donde las mujeres cumplían el papel de madres y esposas, mientras que los hombres se convertían en proveedores), siendo la tensión generada por la diferencia en la educación entre hombres y mujeres una de las problemáticas que le provocaban mayor interés.
Durante sus primeros años fue partidario de un voto calificado, es decir, el derecho al voto sería ganado por aquellas personas que comprobaran cierto nivel de educación y occidentalización.
Su discurso pronunciado durante el 30 de julio de 1960 tuvo un gran impacto mediático entre la población belga, pues dejaba en claro que sus intereses estaban únicamente enfocados en la obtención de derechos para la población de su país, aclarando, como él mismo lo sugirió, que el pueblo congoleño tenía memoria y buscaría rediseñar la estructura del país de forma que este se convirtiera en un país justo y cuyos intereses beneficiaran a su población:
Juntos estableceremos justicia social y aseguraremos para cada hombre una remuneración justa por su trabajo. Le mostraremos al mundo lo que el hombre negro puede hacer cuando trabaja en libertad, y haremos del Congo el orgullo de África. Vigilaremos que las tierras de nuestro país nativos realmente beneficien a sus hijos. Revisaremos todas las leyes y las convertiremos en unas nuevas que sean justas y nobles (Fragmento del discurso en la ceremonia de proclamación de la independencia del Congo, 1960).
En febrero de 2002, más de cuatro décadas de su muerte, el gobierno belga finalmente aceptó la responsabilidad moral por el asesinato de Lumumba, alegando que ciertos miembros gubernamentales tuvieron una culpa irrefutable sobre los hechos, declarando además que la familia de Lumumba, así como el pueblo del Congo recibirían una compensación de 3.75 millones de euros, los cuales serían donados a la fundación Lumumba, misma que fue creada para promover la democracia.
Unos años más tarde, Estados Unidos hizo pública, a través de su publicación Foreign Relations of the United States publicado en 2013, su participación en el crimen. Gran parte de esta participación fue influenciada debido al acercamiento de Lumumba con la Unión Soviética, en un intento de alcanzar la independencia de los colonizadores occidentales y no como un acto de conversión comunista.
Bouwer, K. (2010). Gender and Decolonization in the Congo. The legacy of Patrice Lumumba. New York: Palgrave Macmillan.
Kalulambi, M. (2014). Reciclaje de la historia y deber de memoria. Experiencias belga y congoleña sobre el asesinaro de Patricio Lumumba. Memoria y sociedad, 4 – 17.
Langer, N. (2014). The American Empire in the Congo: The Asasssination of Patrice Lumumba. The Undergraduate Historical Journal at UC Merced, 60 – 66.
Lumumba, P. (30 de Junio de 1960). Discurso en la ceremonia de proclamación de la independencia del Congo. Congo.
Nzongola-Ntalaja, G. (2014). Patrice Lumumba. Ohio: Ohio University Press.
Sartre, J.-P. (1967). El pensamiento político de Patricio Lumumba. Pensamiento Crítico, 50 – 91.
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Urquart, B. (s.f.). Character Sketches: Patrice Lumumba. Obtenido de United Nations: https://news.un.org/en/spotlight/patrice-lumumba-brian-urquhart
Discurso en Ceremonia de proclamación de la independencia del Congo: https://www.marxists.org/espanol/lumumba/1960/junio/30.htm