Anahita Ratebzad
( 1931 - 2014 )
Médica, Política y Activista feminista
Mundo Contemporáneo

En contexto

Nació el 1 de noviembre de 1931 en Guldara, provincia de Kabul, Afganistán. En la década de 1950 fue casada con un cirujano afgano a la edad de 15 años, tuvo dos hijos y una hija, además se integró al movimiento por la democracia y los derechos de la mujer (Armanian, 2018). 

Estudió en el liceo Malali en Kabul y se licenció en 1954 en enfermería. Cuando se permitió el acceso de las mujeres a las universidades, logró estudiar medicina en la Universidad de Kabul (Muñoz, 2016). Se graduó en el año 1962, ese año también fue representativo ya que se separó de su esposo, a partir de ese acontecimiento comenzó su lucha por las mujeres.

Se desenvolvió como embajadora en Belgrado del año 1978 al año 1980, además fue Ministra de educación entre 1980 y 1981. Para el año de 1992 dejó Afganistán, se exilió en diferentes lugares como India, Bulgaria y Lünen, en donde finalmente falleció el 7 de septiembre de 2014, a la edad de 82 años (Muñoz, 2016).

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ASIA

AFGANISTÁN

Bandera

Contexto intelectual

Ratebzad pertenecía a la corriente de pensamiento marxista-leninista, a  partir de la cual comienza a levantar la voz por y para las mujeres en pro de una sociedad que beneficie a todos sus integrantes. Como participante de una delegación de mujeres afganas acudió a la conferencia de mujeres de Asia en 1957 en Celian, siendo ésta la primera vez en que las mujeres afganas participaron en ese tipo de conferencias.

Pensamiento y reflexiones en torno a la democracia

Su lucha y praxis democrática estuvo del lado de las mujeres, ya que en palabras de Ana Muñoz (2016) Anahita como “dirigente de las organizaciones de mujeres tuvo una extensa participación en actividades sociales y políticas”. 

Uno de los mayores aportes que hizo a la democracia fue que organizó la “movida contra el velo” en el hospital Alibad, de Kabul, este movimiento fue representativo ya que se logró que las enfermeras pudieran atender a los pacientes hombres sin tener que llevar el velo (Armanian, 2018). 

Para el año 1964, mientras era parlamentaria, se integró a la Organización Democrática de Mujeres Afganas (ODMA) y para 1980 fue elegida como presidenta, un aspecto relevante es que por primera vez se conmemoró el 8 de marzo, Día internacional de la mujer, en Afganistán. 

Fundó el Partido Democrático de Afganistán (PDPA), ya que en 1965 logró ser una de las cuatro mujeres que el Partido Socialista postularon para el parlamento, además ella intentó que se “pusiera fin al dominio de los señores feudales y el clérigo sobre la sociedad”, el PDPA logró tomar el poder en 1978  (Armanian, 2018).

Una de las misiones que tuvo fue la de alfabetizar al 98% de las mujeres afganas y lograr llevar atención sanitaria a las aldeas. Se lograron hacer diversos cambios sociales, políticos y culturales en la República Democrática de Afganistán (RDA), por ejemplo “cambió los tribunales religiosos por civiles; elevó la edad nupcial de 8 a 16; creó miles de puestos de trabajo para las mujeres con la prestación de guarderías y estableció el permiso de maternidad de tres meses con goce de salario; sembró el país de escuelas; hizo que a finales de 1980, cerca de la mitad del personal sanitario, educativo y el 15% de los periodistas fuesen mujeres” (Armanian, 2018).

Impacto de su pensamiento en el mundo fáctico

Es reconocida como “la madre de la liberación de la mujer afgana” por haber defendido los derechos y la igualdad de género”. Tuvo una participación destacada en la Revolución de Abril en Afganistán en 1978 (Wheeler, 2021). 

Escribió para la edición del 28 de mayo de 1978 de New Kabul Times que:

Los privilegios que las mujeres deben tener por derecho son educación igualitaria, seguridad laboral, servicios de salud y tiempo libre para criar una generación  para construir el futuro del país … educar e iluminar a las mujeres es ahora un tema de gran atención por parte del gobierno (Wheeler, 2021).

 Logró que un grupo de mujeres enfermeras no usaran el velo cuando asistían a pacientes masculinos, logrando una revolución en el tema de atención médica y también en la igualdad de derechos para las mujeres trabajadoras.

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